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La anarquía es producto de la vista gorda que se hacen algunos funcionarios
"La Alcaldía de Libertador me asignó el puesto aquí en la esquina de Cruz de Candelaria y ellos son los que tienen que venir a regular", era el comentario de la vendedora de medias de caballeros y niños.

Igual respuesta se obtuvo del vendedor de lentes que copaba la esquina de Alcabala, que manifestaba que "la Alcaldía es la encargada de reubicarnos, si no no me muevo".

A su vez los trabajadores informales que cumplen con las medidas y la ubicación del Decreto 208 se quejan de los "anárquicos que dañan la imagen de los trabajadores".

"Aquí no tenemos que esperar que venga un policía para respetar la ley, tenemos 15 años en el puesto y nos acogemos a cada decreto que han sacado las autoridades de la Alcaldía", explicó Josefina Herrera.Ilegales en áreas no permitidas

"Quienes están en las áreas no permitidas son los trabajadores ilegales, los que no están censados, los que no pertenecen a ninguna asociación y que las autoridades no hacen cumplir el decreto", explicaron varios buhoneros.

A partir de hoy los trabajadores de Bellas Artes tomarán sus puestos de trabajo, advirtiendo que ellos serán los primeros en denunciar a los que se instalen en áreas no permitidas.

"Por ser solidarios terminamos siendo los culpables de la anarquía de la ciudad", indicó Yolanda Wundheiler, de dulcería criolla.Orden en los bulevares
Hoy se instalarán los buhoneros del bulevar de Catia. "Respetando el Decreto 208 como hemos acordado con el director de Gestión Urbana, Silfredo Zambrano, y estaremos todos estos días conversando con los compañeros para quitar los toldos y acortar los tarantines", indicó Giovanni Moncada.

Los trabajadores informales también fueron advertidos de la nueva Ordenanza de Convivencia Ciudadana en donde se estipula una serie de multas por infracciones en la vía pública como ruidos, beber alcohol y orinar en la calle.
Por su parte los trabajadores informales del bulevar de Sabana Grande siguen con la incertidumbre de qué va a pasar con ellos.

"Un día nos dicen que nos pongamos el 15, luego que el 30, más tarde nos dicen que los vendedores de comida sí pueden colocarse hoy pero que la mercancía seca tiene que esperar. En fin no sabemos qué va a pasar con nosotros y eso ha sido año tras año", indicó Ana Obregón.

Ayer los trabajadores informales volvieron a marchar a lo largo del bulevar de Sabana Grande. Advirtiendo que no quieren ningún tipo de enfrentamiento, sino mesas de diálogo con las autoridades, vecinos y los comerciantes formales del sector para darle una solución que favorezca a todos por igual.

Al igual que los buhoneros del centro exigieron que las autoridades tengan mayor presencia para poner el control necesario y dar mayor seguridad.