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Los informales esperan que a la quinta fecha vaya la vencida
Los baños están hechos, el portón es nuevo y el piso está completamente rayado a la espera de los trabajadores informales que entrarán el próximo sábado al terreno que se encuentra en la calle Humboldt, final de la Casanova.

Mientras los obreros daban los últimos toques, un aproximado de 30 informales esperaban a las puertas del terreno alguna información.

"No tenemos certeza de quiénes van a entrar en el terreno. Nos llama la atención que el alcalde Freddy Bernal hable de dos mil trabajadores informales del bulevar de Sabana Grande; pero las cifras que tenemos del empadronamiento arrojan tres mil", indicó José Chaurán, uno de los coordinadores de los informales.

A su vez, los buhoneros indicaron que no saben cómo va hacer la ubicación en el terreno, "no sabemos si es por número, por sorteo o si es corriendo para ver quién toma el puesto".

Aseguran que hasta los momentos las autoridades no les han dado ninguna información y esperan una "reunión seria para conocer con detalle cómo vamos a funcionar en el terreno", aseguró Chaurán.

A todos los presentes en el portón del terreno les asustó la palabra "depuración", utilizada por las autoridades de la Alcaldía de Libertador. Aseguran que desde un principio se habló de darle un puesto a cada trabajador del bulevar, "sin discriminación de ningún tipo".

Los dirigentes aclaran que "en ningún momento, ellos participaron en un proceso de depuración de las listas de los trabajadores de Sabana Grande. Eso lo habrán hecho las autoridades solas".
A dos meses de paro
"Prácticamente es un paro lo que estamos haciendo. Llevamos 52 días sin trabajar y sin percibir dinero para la casa", comentaron los informales que se encontraban a las puertas del terreno de Casanova.

Tampoco tienen información sobre los trabajos que se deben realizar en el edificio que será el centro comercial y que se encuentra al final del bulevar.
Los dulceros criollos
"Hoy vamos a tener una reunión con la directora de Control Urbano, María Carrero, para ubicar en un plano a los dulceros criollos que han estado trabajando por muchos años en Sabana Grande. Son uno por cuadra en las laterales", explicó Yolanda Wundheiler, del sindicato que agrupa a este sector.
Advierte que los dulceros se colocarán en las calles laterales del bulevar y que en los actuales momentos hay cuatro trabajadores que tendrán que ser reubicados, pues se encuentran en plena caminería.

Los trabajadores esperan que apenas terminen estas gestiones los dulceros puedan salir a trabajar normalmente.

El éxodo de los buhoneros de Sabana Grande se ha reflejado en la avenida Universidad, Catia y Candelaria.